jueves, 5 de marzo de 2009

¿Y qué más he de perder?

¿Y qué más he de perder? Si ustedes los areneros, paladines del orden establecido y combatientes del comunismo, desaparecieron a mi hermano con sus escuadrones de la muerte en los años 80’s. Sí, ustedes se vanaglorian de ser los defensores los derechos humanos, pero con sus grupos de exterminio (escuadrones de la muerte), al mando de su ex-mayor D’Aubuisson, violaron los derechos de la población salvadoreña, persiguieron la religión católica asesinando feligreses, catequistas, celebradores de la palabra, monjas, sacerdotes y al máximo jerarca: Monseñor Oscar A. Romero. Que interesante es leer su lema: PAZ (la que nos dan para morar en las tumbas), PROGRESO (el que logran sus empresarios al explotarnos) y LIBERTAD (la que ustedes gozan para restringir nuestras acciones), lema sin sentido para quienes no estamos en su logia, porque no queremos, porque no lo aceptamos, porque no vivimos la realidad que ustedes pregonan y porque no aceptamos esas categorías bajo falsas concepciones.
Díganme qué más me toca perder, si ya no tengo casa porque el sistema financiero me la expropió luego que me dejaron sin trabajo; si ya no tengo trabajo y ahora soy un desempleado que apenas si vende su mano de obra en lo que caiga día a día; si no tengo seguridad social y tengo que mendigar una consulta y la medicina en el sistema público de salud; si mis hijos no pueden asistir a la escuela porque no me alcanza para pagar los gastos que esto significa y ellos me tienen que ayudar a trabajar; si lo poco que gano lo ocupo para comer racionadamente, para medio vestirme, en fin para medio vivir; si mi abuela y mi madre no tienen una pensión luego de haber trabajado toda su vida; si mis amigos salen a cada rato para Estados Unidos en busca de trabajo y un mejor vivir.
Contéstenme señores areneros, qué más he de perder en la vida, si ustedes y sus políticas me han hundido en la miseria. Díganme señores qué he ganado con sus gobiernos, cuáles son los beneficios que me han hecho llegar. Es acaso que hoy nos quieren seguir asesinando con otros métodos para lograr una raza aria-salvadoreña y vivir libres de pobreza? Hasta cuándo estaré condenado a vivir así? Esta condena la comparto con muchos miles más a perpetuidad, es una condena a ser asesinado por sus proyectos neoliberales. Ya me dieron 20 años de miseria, qué más tengo que esperar de ustedes?
Areneros, ustedes me quieren terminar de condenar porque pienso diferente a ustedes, porque mis anhelos no son compartidos por ustedes. A pesar de ello, tengo la esperanza de tener un país diferente, y por eso voto por el cambio, areneros asesinos.

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